Un contratiempo técnico en una embarcación de pasajeros en Indonesia alteró el viaje que la creadora de contenido Alba Díaz realiza por el sudeste asiático junto a su pareja, Marcos Terrones. El incidente, ocurrido durante un trayecto marítimo con destino a Bali, obligó a la intervención de las fuerzas policiales locales para evacuar a los pasajeros, entre los que se encontraba la pareja. Horas después, su padre, Manuel Díaz, ofreció detalles sobre lo sucedido desde un plató de televisión en España, con el objetivo de precisar el alcance de los hechos.
Un viaje marítimo con complicaciones
La secuencia de acontecimientos comenzó cuando los planes de viaje de la pareja sufrieron una modificación inicial. Según relató la propia Alba Díaz en sus perfiles de redes sociales, su intención era utilizar un servicio de barco rápido para desplazarse entre las islas. No obstante, las condiciones meteorológicas adversas motivaron la cancelación de dicho servicio. Fuentes del entorno de la viajera mencionaron que esta cancelación se produjo en un contexto de preocupación, aludiendo a un suceso distinto ocurrido el día anterior en una embarcación similar.
Como alternativa, Díaz y su acompañante optaron por embarcar en un ferry de mayor tamaño, cuyo trayecto programado tenía una duración aproximada de seis horas. El viaje transcurrió con normalidad hasta el momento de la llegada a puerto. Al atracar en el muelle de Bali, el buque experimentó una avería en su motor. El oleaje provocó que la estructura de la nave colisionara repetidamente contra el dique, lo que resultó en un fallo del sistema eléctrico. Esta concatenación de fallos impidió el accionamiento de la compuerta principal de desembarco, dejando a todos los pasajeros sin posibilidad de salir del navío por los cauces habituales.
La intervención de las autoridades y el desenlace
Tras la avería, los pasajeros permanecieron en el interior de la embarcación durante un periodo que se prolongó alrededor de cuatro horas. Durante este tiempo, la falta de información y la incertidumbre sobre la resolución del problema afectaron el ánimo de las personas a bordo. Algunos de los testimonios gráficos compartidos por la propia afectada describen un ambiente de tensión, en el que algunos pasajeros tomaron la iniciativa de abandonar el barco por sus propios medios, saltando al agua o utilizando escaleras improvisadas.
Finalmente, agentes de la policía indonesia se personaron en el lugar para organizar la evacuación. El operativo consistió en desalojar a los viajeros por una de las secciones frontales del ferry. Los policías ayudaron a las personas a saltar desde la cubierta hasta el muelle, colaborando también en la recuperación del equipaje. El rescate se completó sin que se reportaran heridos de consideración. Una vez en tierra, Alba Díaz comunicó a través de sus canales digitales que, a pesar de la experiencia, se encontraba bien y que el suceso quedaba en una anécdota. En sus publicaciones, hizo una mención especial al apoyo de su pareja durante los momentos de mayor inquietud.
Declaraciones desde el plató de ‘TardeAR’
En España, la noticia fue abordada en el programa de televisión ‘TardeAR’, donde colabora Manuel Díaz ‘El Cordobés’. El extorero intervino para matizar la información y ofrecer una perspectiva directa sobre el estado de su hija. «No ha sido nada alarmante», afirmó, explicando la naturaleza técnica del problema. «Un ferry que no se abría la puerta, y los sacaron por delante. Lo que pasa es que se ha escandalizado mucho. Pero nada, nada, todo bien», detalló con un tono sereno, agradeciendo el interés de los presentes.
Asimismo, confirmó que mantiene comunicación constante con su hija, quien ha continuado con su itinerario previsto. «Está pasando unas vacaciones fantásticas, me escribe y me está mandando unas fotos de locura», comentó.
Contexto del viaje y situación actual
El viaje a Indonesia era, en su concepción original, un plan familiar. El propio Manuel Díaz explicó que la idea inicial era que varios miembros de la familia viajaran juntos, pero diferentes circunstancias impidieron que se concretara de esa forma. «Me da mucha pena porque ese viaje al principio lo íbamos a hacer todos juntos, pero al final se torció la cosa y, bueno, ella está ahí», señaló. No obstante, dejó abierta la posibilidad de reunirse con su hija en el destino asiático: «No descartamos ir para allí a verla toda la familia».
Superado el incidente, Alba Díaz ha proseguido con sus vacaciones en Indonesia. Sus publicaciones posteriores muestran cómo ha retomado sus actividades turísticas, describiendo su llegada a un nuevo alojamiento como «un auténtico regalo» después de la tensión vivida en el barco. Su testimonio actual se centra en la normalidad y en disfrutar de la experiencia del viaje.
